lunes, 23 de noviembre de 2009

Poem

Sombra remota que peca
intentando pronunciar un eco
que despierta una mueca
en ruborizados cabellos
-demacrados y polvorientos-.

¡Oh! Endemoniada alma
que te disfrazas de palabras
pertubadores designios
encomiendas con silencios
-como cadencias sin sentidos-.

Y sostienes ¿tú?, mismísimo
Anticristo, pura vileza,
que los días insípidos
son fruto de la maleza
intrínseca de aviones
zumbantes de reflexiones.

Osas contradecir al pensamiento
¿que no vivimos murmullas?
ay, inocente marea, eres miedo
para tempestades mudas
no te preocupes mensajero
tu hastío será lo que te consuma.

No hay comentarios:

Publicar un comentario